Madrid. La ciudad de Pittsburgh (Pensilvania) se ha despertado este sábado con un tiroteo que ha causado varios muertos en una sinagoga del centro urbano.
La policía acudió alertada tras recibir avisos que informaban de disparos en el templo judío, según informa la emisora KDKA, asociada a CBS, que habla de ocho muertos. En cambio, la cadena CNN, citando una fuente oficial, informa de que las víctimas son «al menos cuatro muertos».
La KDKA afirma que el francotirador, un hombre blanco con barba, se ha entregado después de resultar herido en el intercambio de tiros y la CNN añade que ha sido hospitalizado.
Hasta el momento, la Policía local de Pittsburgh solo ha informado de que se han producido «numerosas víctimas» a través de su jefe de policía, Jason Lando, y heridos, entre ellos tres agentes.
«El sospechoso del tiroteo está bajo custodia. Tenemos muchas víctimas dentro de la sinagoga, tres oficiales han sido afectados», informó Lando a los medios locales, según recoge la agencia AFP.
El presidente de EE UU, Donald Trump, ha enviado a través de su cuenta de Twitter un mensaje de alerta sobre la situación. Ha afirmado que sigue el desarrollo de los tiroteos «de cerca».
«Es algo terrible, terrible, lo que está pasando en nuestro país con el odio. Hay que hacer algo». Trump se ha mostrado sorprendido de que hubiera «un maníaco» con armas en la zona y que la sinagoga no contara con seguridad armada.
«Quizá las cosas hubieran sido distintas si hubiera habido alguien armado», ha añadido. «Ver este tipo de tiroteos [en EE UU] desde hace tantos años es una pena».
La sinagoga de la congregación El árbol de la vida celebraba el sabbat, el día sagrado en la semana judía. El oficio había comenzado a las 9.45 de la mañana, 15.45 hora peninsular española.
Los agentes han pedido a los vecinos que permanezcan en sus casas porque, según la misma fuente, se produjo un intercambio de tiros entre la policía y un francotirador, que la emprendió a tiros con los agentes cuando aparecieron en escena.
Los agentes se apostaron detrás de sus vehículos para refugiarse de los disparos. La concejal del distrito, Erika Strassburger, declaró que el francotirador se había atrincherado en el interior del edificio.